
Claudia Merino
Psicología Humanista.
“No es el evento lo que traumatiza, es la experiencia de sentir la soledad ante el evento” Gabor Maté
No sé de soluciones perfectas. Pero aprendí a quedarme cuando todo se desordena
“Ser psicóloga no fue una vocación para mi desde pequeña. Pero la curiosidad –esa molesta vocecita que no se calla hasta que entiendes el porqué de todo lo que sientes– me empujó primero a mi propia terapia y, después, directo a la Psicología Humanista. No porque suene bonito, sino porque por fin encontré una forma de entender al ser humano que no parte del juicio, ni del diagnóstico, ni de encajar en moldes. Y eso, créeme, es raro.
A partir de ahí, seguí explorando diferentes caminos dentro de la psicología humanista. Spoiler: sigo explorando. Porque esto no va de tener todas las respuestas, sino de hacerse las preguntas adecuadas.
¿Y en consulta? Mi trabajo es crear un espacio seguro, sin etiquetas ni miradas de juicio, donde puedas poner sobre la mesa lo que sea que te esté pesando. Sin prisa, sin filtro y, sobre todo, sin juicio. Aquí no vienes a que te “arreglen”, vienes a encontrarte.
Cuando huir se vuelve contra nosotros
Imagina que eres Simba. Sí, el león. El que vio cómo su padre moría aplastado por una estampida y encima se tragó la culpa porque un tío manipulador — Scar— le hizo creer que todo era su culpa. ¿Y qué hizo Simba? Huyó. Se largó al medio del desierto a cantar con un suricata y un jabalí, repitiéndose el mantra de “Hakuna Matata” mientras enterraba su dolor bajo una montaña de insectos y evasión emocional.
Spoiler: no funcionó.
Porque tarde o temprano, el pasado te muerde el cuello. Y entonces, te toca decidir: seguir huyendo o darte la vuelta y mirar de frente a esa parte de ti que duele, que asusta, que incomoda... pero que también tiene la llave para que por fin dejes de vivir en modo piloto automático.
Ansiedad, depresión, problemas emocionales, problemas en tus relaciones, duelos, falta de motivación, dificultades para entenderte, problemas con la comida, autoestima, trauma, inseguridades, miedos…
¿Me podría ayudar la terapia?
Si sientes que alguna de estas cosas te está desbordando, es posible que estés atravesando un momento difícil. No tienes por qué enfrentarlo sola o solo.
Preguntas frecuentes
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No necesitas estar al límite para pedir ayuda. Si algo te duele o te incomoda, eso ya es motivo suficiente. La terapia también es prevención y autocuidado.
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No necesitas tener todo claro. En terapia, lo que traes es suficiente. Incluso el silencio o la confusión pueden ser un punto de partida valioso.
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Cada proceso es único. El objetivo no es que dependas del espacio terapéutico, sino que ganes herramientas para ser más autónomo/a emocionalmente. Tú marcas el ritmo.
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Cada terapeuta y cada proceso son distintos. Si antes no fue lo adecuado, no significa que ahora no pueda ser diferente. A veces es cuestión de encontrar el espacio y la persona correctos.
Servicios
— Psicoterapia para adultos —
El espacio de psicoterapia es un lugar seguro donde poder comprenderse, cuestionarse, sentirse y aprender con un otro desde el cuidado y el respeto hacia uno mismo.
— Psicoterapia para niños y adolescentes—
El espacio de psicoterapia para los niños y los adolescentes pretende brindarles un lugar donde puedan conocerse y aprender a regular sus emociones y sus conflictos.